Confesiones de invierno

Supongo que es porque soy oso, pero en invierno es muy difícil que duerma poco, y no me gusta dormir mucho, al menos no solo, porque pasas mucho tiempo solo, y para no estar solo, tenés que soñar, y soñar es lo que te toma tanto tiempo de dormir.

A veces es necesario dormir de más, y quizá anoche hizo falta para que me saquen un par de risas los sueños, no se bien por qué, pero no importa, una sonrisa nunca podré negársela a alguien, no mientras sea yo, y no suceda algo que me cambie de raíz.

Se siente extraño de todas formas, porque siento que debería tener un amor en el que pensar, y no me surge, y no es feo, pero es como si una ecuación no saliera enteramente bien, como si no te convenciera un color, pero que sabés que mal no queda. Básicamente se puede esperar mucho de un invierno, de hecho no me ha dado poco este, me dió momentos de magia hermosa, y sé que faltan un par de momentos así aún, y es sólo cuestión de poner sobre la mesa lo que las estaciones nos quitan.

Un ejemplo es hacerse de un solcito cuando llueva o se nuble, y cuando haya mucho sol, hay más opciones aún, al menos para alguien solar.
No la paso bien con momentos nublados o lluviosos, no sin una linda compañía, estando solo es mas bien una muerte, una muerte por la que se pasa y ya, pero preferiría que sea con macitas y un mate.


Hoy sonrío mucho igual, porque encuentro motivos para la alegría, y la risa del tonto me inunda, y aparte, si lográs estar feliz en un invierno frío y solo, difícilmente estarás en apuros, así que eso supuse para mí.

Planeo sacudirme los virus, e ir bastante a aikido que tan poca oportunidad tomé este último par de meses, planeo muchas cosas, más que nada entre ideas planeo, y no aterrizo en muchas.

Es más linda una vida con posibilidades, y no es fácil encontrar compañía, por suerte yo tengo calor de abrazos, y cada tanto una muchacha que me sonríe.

Pasa siempre lo mismo en la vida, pero con personas distintas, y eso hace la vivencia algo distinto y hermoso, y es lo mismo con cada comida y siesta.

Y quisiera dormir mi próxima siesta con alguien que me abrace con cariño.