miércoles, 10 de junio de 2009

Sobre amor en viajes y estancias

Los viajes (no me gusta sentenciar) suelen sentirse como picante de la vida, pimienta, sal, gustoso y agotador, períodos de aventura que nos dan enseñanzas que no aplicamos y aplicamos enseñanzas aprendidas, sensación de frescura y novedad, así los siento, como propios, mas intensos si compartidos.


Las épocas de descanso entendemos qué aprendimos del viaje, estamos dentro de una casa con frío afuera, mas allí hace calorcito, hay un hogar y un fuego, comida caliente y sonrisas.

Es cuando el hogar se pone frío que conviene partir hacia un nuevo horizonte si me lo preguntan, y los hogares cada vez son mas preciados despues de los viajes, que son cada vez mas largos, siempre me pregunto cual será mi mejor viaje, y al mismo tiempo, cual será mi último y mas dulce hogar

4 comentarios:

  1. ay pero vos patis, no ves q sos un tierno??? =P
    vos me decís a mí pero el q quiere estar de viejito con una viejita y dos sonrisas en la cara, sos vos! =P

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  2. Jojo, esto me recuerda una letra de unos gallegos medio maricas pero re simpáticos que iba algo así como:

    "No eches raíces en un sitio, muévete
    Pues no eres un árbol, para eso tienes dos pies
    El hombre más sabio es el que sabe que su hogar
    Es tan grande como pueda imaginar"

    (entera en http://www.musicsonglyrics.com/M/magodeozlyrics/magodeozladanzadelfuegolyrics.htm)

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  3. y por q error?? nunca dije q sea ni mi presente ni el tuyo zapato de oso =P

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And baby says?